viernes, 28 de febrero de 2020

Ciclo de cine de Cáritas

    Un año más, ya es la XXVII edición, en el mes de febrero, Cáritas organiza un ciclo de cine de sensibilización. Este año, con el lema Pobreza y Exclusión social quiere llevar esos temas al ánimo de los asistentes para que reflexionemos sobre los mismos, hoy tan presentes en nuestra sociedad.
Para ello organiza unas sesiones de cine, tres en total, con películas bien elegidas, durante los domingos de febrero. Este año es en el colegio de La Salle. Cuentan con una asistencia muy numerosa. Al principio hay una presentación de la película y, al finalizar la misma, los asistentes formulan preguntas a los invitados de la Mesa, entablándose un coloquio que, para mí, es de lo más interesante pues llevan a una reflexión seria sobre el tema que trata el film.

    El primer domingo, la película proyectada fue Fátima, sobre los problemas de la inmigración.
Fátima es una mujer argelina que llega a París, sin conocer el idioma y con una cultura distinta. Ella es musulmana. Divorciada, tiene que sacar adelante a dos hijas cuya cultura ya es distinta a la suya. La mayor empieza a estudiar Medicina, en la Universidad y se siente avergonzada porque su madre, para poder pagarle los estudios, tiene que limpiar las casas ajenas.
La pequeña es una adolescente rebelde, que no hace caso de los consejos de la madre, enfrentándose a ella, maltratándola, llegando a decirle que no vale nada. El esposo de Fátima también vive en París, donde ha formado una nueva familia pero, afortunadamente, apoya a la madre en su trato con las hijas. Fátima tiene un accidente en el trabajo y, durante la baja laboral, comienza a escribir, en árabe, para que sus hijas no olviden sus raíces.
En la película, los hombres figuran un poco de forma tangencial. Son las mujeres las que llevan todo el peso, tienen que sacar a la familia adelante, buscando que el futuro de sus hijos sea mejor que el suyo propio. Hay distintas formas de violencia: la burguesía que contrata a Fátima y se siente mal porque la inmigrante estudia Medicina; la propietaria de un piso que no lo quiere alquilar a una mujer con velo -una discriminación-; y, sobre todo, la hija menor que ataca ala madre, considerándole una basura porque no tiene sus mismas ideas y ésta la reprende.
Al final de la proyección hubo numerosa intervenciones, pues son muchas las Fátimas que pasan por Cáritas, en sus acogidas. Todas tienen problemas, por desconocimiento del idioma y de la cultura del país de acogida. Los hijos se adaptan muy pronto a la nueva cultura, no así los padres que tienen que superar el choque cultural y generacional.

    El segundo domingo se proyectó la película Invisibles, protagonizada por Richard Gere. Según el actor, nunca se sintió tan invisible en Nueva York como durante el rodaje de la película, vestido con los harapos del hombre sin techo, lejos de los trajes a medida y de todo glamour.
Trata sobre el crudo problema de los Sin Techo.
George, una persona que ha perdido todo: trabajo, hogar, familia...Se ve abocado a vivir en la calle, buscando un lugar donde poder dormir tranquilo, chocando siempre con la burocracia del sistema. No tiene documentación y esto le impide acceder a los recursos sociales. Logra entrar en un albergue inmundo, donde hay hacinamiento de personas, sin privacidad alguna. Allí conoce a otro residente con el que llega a una cierta amistad. Éste conoce muy bien el mundillo de la calle y logra poner a George en contacto con su hija y que reanuden sus relaciones.
Es una película muy dura, pero es lo que estamos viendo a diario en cualquier ciudad de nuestro entorno. Están ahí pero parecen invisibles porque nadie los toma en cuenta. Vemos cómo el protagonista se va degradando, poco a poco, hasta llegar a comer restos de comida de una bolsa del cubo de la basura. El permanecer en la calle va avejentando al individuo y haciéndolo más vulnerable. Se puede llegar a esta situación por diversos motivos: el alcoholismo y las drogas suelen estar presentes y ser la causa de la pérdida del trabajo, familia y todas las relaciones sociales.
Asistieron a la proyección un grupo de personas sin techo, miembros de una asociación.  Hubo muchas intervenciones, resultando el coloquio muy interesante. Siempre debe haber segundas oportunidades y confiar en la persona que comete un error.

    El tercer domingo se proyectó el film El regreso de Ben, protagonizado por Julia Roberts y Lucas Hedges. Trata del problema de las drogas.
Ben es un adolescente que regresa a casa la víspera de Navidad. Estaba en un centro de desintoxicación. La reacción de la familia ante el regreso es variada. La madre acoge al hijo con todo el amor y la comprensión de que es capaz, como el padre de la parábola del hijo pródigo, pero con medidas de prudencia, luchando a brazo partido por ese hijo que la necesita. Su hermana duda de que sea una buena idea y el padrastro piensa, también, que estaban mejor sin él, que no traerá mas que problemas. Los dos niños del segundo matrimonio de la madre están muy felices con el hermano mayor que juega con ellos y se pone a su nivel.
El primer tropiezo surge cuando esa noche, al regresar de la iglesia, encuentran que han entrado en la casa y ha desaparecido el perro que tanto quiere Ben. El padrastro le hace ver que han comenzado los problemas por su regreso. El chico quiere recuperar a su perro y huye de la casa, buscando quienes pueden habérselo llevado. La madre sale a buscarlo y juntos comienzan una larga peregrinación por todos los lugares donde el hijo cree que puede encontrarlo. Para ello, en un momento huye de la madre, actuando como camello para pasar una gran cantidad de droga, a cambio del perro y una papelina de morfina, que se inyecta en un edificio deshabitado, donde logra encontrarlo la madre, gracias al perro, inconsciente, víctima de una sobredosis. Su amor y el coraje y sangre fría de la madre, logran devolver la vida al hijo.
Nos mete dentro del crudo mundo de las drogas, sus mentiras, sus contradicciones, sus tormentos, sus miedos....Pero también vemos el coraje y la fuerza que le da a la madre el amor del hijo, donde encuentra el reposo y la ayuda que necesita.
Es un drama familiar que afecta a todos los miembros. Es ésta, la familia,quien más va a influir en el comportamiento del drogadicto.
Como en las sesiones anteriores, hubo muchas preguntas en el coloquio pero todas pueden resumirse en una ¿qué lleva a la droga?. En este caso parece que fue un tratamiento en el que se iba aumentando gradualmente la dosis hasta convertirlo en adicto. Pero hay otras maneras: vacío existencial, malas compañías, curiosidad malsana, insatisfacciones,etc Sea cual sea la causa, el problema está ahí y es difícil de resolver.