Es una obra de teatro de Antonio Buero Vallejo. Es una tragedia escrita entre los años 1946-1947, en plena posguerra, y estrenada en Madrid en 1949.
El autor nace en Guadalajara en 1916. Hijo de militar, asesinado durante la guerra. Pasó su infancia en la Alcarria, salvo dos años en Larache, donde estuvo destinado el padre. Estudió el Bachillerato en su ciudad natal, trasladándose con su familia a Madrid en 1934. Allí seguiría otros estudios, Bellas Artes, que eran, con el teatro, sus grandes aficiones.
Al comenzar la Guerra Civil, quiso alistarse como voluntario, impidiéndoselo el padre. Pero después fue llamado a filas y destinado a infantería. Se afilió al Partido Comunista. Al finalizar la guerra, estaba en Valencia, donde fue detenido. Pasó por campos de concentración, cárceles; condenado a muerte, se le conmuta la pena por otra de 30 años de prisión, pero salió pronto y, en 1946, fija su residencia en Carabanchel Bajo. En la cárcel coincide con Miguel Hernández, a quien hace un retrato.
Su obra es muy extensa pero se puede agrupar en tres apartados:
-Teatro simbolista, con obras como En la ardiente oscuridad, La tejedora de sueños o Irene o el tesoro.
-Criticismo social con Historia de una escalera, El tragaluz o Las cartas boca abajo.
-Dramas históricos con Un soñador para un pueblo, Las Meninas o El concierto de San Ovidio.
Los personajes de sus obras, generalmente, presentan alguna tara física o psíquica, son complejos, experimentan un proceso de transformación a lo largo de la obra; unos son activos, egoístas, que pueden llegar a ser violentos, y otros son contemplativos, se sienten angustiados. Se mueven en un mundo cerrado a la esperanza. A pesar de sus limitaciones, sueñan, pero están abocados al fracaso porque nunca se cumplen sus deseos.
La obra consta de tres actos. Del primero al segundo transcurren diez años y del segundo al tercero, veinte. En este tiempo algunos personajes mueren y aparecen otros nuevos. Se desarrolla en la escalera de una modesta casa de vecindad. Hay cuatro puertas y, en cada una vive una familia.
-Generosa y Gregorio son los padres de Carmina y Pepe. Es la familia de más bajo nivel económico. Tienen la desgracia de que Pepe es un golfo, fanfarrón, un degenerado que vive de las mujeres.
-Don Manuel y su hija Elvira son los ricos de la casa. El padre se las da de generoso y la hija es consentida y caprichosa.
-Paca y el Señor Juan son los padres de Trini, Rosa y Urbano. Rosa, un poco ligera de cascos, está enamorada del calavera de Pepe. Urbano es un obrero con sueños sindicalistas.
-Doña Asunción, viuda, es la madre de Fernando. La madre es una señora de "quiero y no puedo", que ha conocido tiempos mejores, pero que ahora pasan apuros económicos porque el guaperas de su hijo es un vago con muchos sueños en la cabeza. Está enamorado de Carmina y ella le corresponde.
En el segundo acto ha muerto Gregorio y quedan Generosa y Carmina solas.
Fernando se ha casado con Elvira, la hija rica y tienen un niño, Fernandito. También han muerto Doña Asunción y Don Manuel.
Paca y el Señor Juan viven con Trini y Urbano.
Rosa y Pepe viven juntos en una de las viviendas de la misma casa.
En el tercer acto han muerto Generosa y el Señor Juan y, ahora, hay otros dos inquilinos, de mejor posición social, que significan el progreso y la esperanza del futuro.
Fernando y Elvira, matrimonio fracasado, han bajado de categoría social. Tienen dos hijos: fernando y Manolín.
Carmina y Urbano se casaron, otro fracaso de matrimonio. Tienen una hija, Carmina. Viven con ellos Trini, Rosa y Paca, su madre.
Carmina-hija y Fernando-hijo están enamorados, con la oposición de las familias. La historia se repite, incluso emplean las mismas palabras que sus padres y manejan los mismos sueños.
En el primer acto la llegada del cobrador de la luz sirve para presentar a los personajes con sus características y el nivel socioeconómico. Termina el acto con la declaración amorosa de Fernando a Carmina, en el "casinillo", y sus planes de futuro: el cuento de la lechera que termina derramándose la leche que llevaba Carmina.
El segundo acto es el entierro de Gregorio. Rosa y Pepe viven juntos y ella sufre maltrato y penurias económicas. Hay enfrentamiento entre los vecinos. Urbano le pide a Carmina matrimonio y ella acepta como solución a su vida y a la de su madre, ambas han quedado "con una mano delante y otra detrás". Por otra parte, Fernando, su amor, ya se ha casado con Elvira.
En el tercer acto aparecen otros dos personajes bien vestidos que ocupan dos viviendas. Tienen poco en común con los inquilinos antiguos, quienes continúan con la rutina de su vida, pero ya en franco enfrentamiento. Las familias de Fernando y Urbano se odian y se oponen a la relación de sus hijos. La historia, como una rueda, gira y vuelve al punto de partida.
El tema común, presente en toda su obra es la tragedia del individuo, analizada desde un punto de vista social, ético y moral. Es el sentido trágico de la vida. Hay un determinismo en la vida de los personajes, una impotencia para salir de su estado y progresar en la vida. Las frustraciones pasan de padres a hijos.
Carmina sufre una frustración sentimental.
Pepe evoluciona hacia el alcoholismo y la degradación social.
Trini es la persona que se ha dedicado a los demás, olvidándose de sí misma. Le habría gustado formar una familia y tener unos hijos.
A Rosa también le habría gustado que Pepe fuese de otra forma, y haber formado una familia normal.
Elvira, al casarse con Fernando desciende de categoría social y, no es feliz en el matrimonio porque sabe que se casó con ella por el dinero de su padre.
Fernando es fantasioso, aspira a mejorar en la vida , pero no hace ningún esfuerzo por conseguirlo.
Urbano ha fracasado en sus sueños sindicalistas y en el matrimonio porque no ha conseguido el amor de su mujer.
Manolín es el niño mimado que sabe sacar provecho de todo.
En los jóvenes fernando y Carmina vemos reflejados a sus padres que contemplan, desde la escalera, la escena protagonizada poe ellos años atrás.
La obra es el retrato de la sociedad de posguerra. Denuncia la injusticia social y el inmovilismo. La intención moral es remover conciencias e incitar a la sociedad al progreso, con el esfuerzo de todos.
La acción es lineal, sosegada sin altibajos, La tensión va en aumento, resolviéndose el dedenlace de manera breve, repitiéndose el final del primer acto.
El autor describe cómo ha de ser el escenario, siempre la escalera, con sus tramos, su descansillo y las cuatro puertas. En los dos primeros actos sucia y pobre y en el último había mejorado un poco su aspecto. Abajo, el "casinillo", introduce el misterio. En las acotaciones, intercaladas en los diálogos, introduce al lector-espectador como parte integrante de la obra, para que opine.
Con el trato que da a los personajes (Doña Asunción, Don Manuel, el Señor Juan, Generosa...),el autor nos dice mucho de cómo son, su nivel socioeconómico. En el lenguaje también hace distinciones. Todo el es coloquial y accesible, pero culto, sin vulgarismos. El diálogo es rápido, frses cortas. Utiliza mucho el vocativo y el imperativo. Hay muchos adjetivos y formas afectuosas.
La simbología es abundante. La escalera, esa casa de vecindad modesta, podemos trasladarla a la España de la época. Es hasta un poco profética, pues la sociedad española sufrió prolongados años de un letargo histórico, aislada del mundo, hasta salir del bache.
El cuento de la lechera aparece como símbolo de la no consecución de de los sueños de los personajes y el "casinillo", donde se reunen, a veces, es el elemento del misterio.
Cuando se estrnó la obra, tuvo mucho éxito de público y de crítica y se ha representado mucho. En aquel momento era un tema muy actual. Hoy, han cambiado las condiciones sociales que presenta la obra, pero sería bueno que las jóvenes generaciones conociesen cúales eran las condiciones de vida de aquella sociedad de posguerra.
Se bpuede representar o, simplemente, disfrutar con su lectura.
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